jueves, 20 de diciembre de 2007

Por una educación integral y sin dogmas




Algunos sectores han denunciado que los Decretos 351 y 365 eliminan materias de orden humanista (tenemos conocimiento de que el 351 fue derogado). El Ministro de Educación habló de “asignaturas opcionales”. Conceptos como Espacios Curriculares Abiertos (ECA) no quedan claros y no estaría mal que algún pedagogo nos iluminara. Si hay algo saludable para el espíritu es saber dudar e interrogar la realidad. Como escritor y padre de dos hijos que van a la escuela pública, no puedo quedarme como Mizaru, Kikazaru e Iwazaru, los tres monos místicos, indiferente ante un tema que tiene que ver con nuestro enjuto sistema de educación.
El Consejo Nacional de Educación, integrado por prestigiosos intelectuales de nuestro país entre los cuales podemos mencionar a Alma Montenegro de Fletcher, Raúl Leis y Carmen Miró, nombrado por el propio señor Presidente de la República para hacer recomendaciones al problema de la educación en Panamá, y que tenemos entendido está por encima del Ministerio de Educación, rindió un informe sobre la actual situación de la educación a comienzos de este año. En su apartado: Otros problemas (PG, 61), se puede leer:
“La educación de calidad requiere que el proceso de aprendizaje fomente el conocimiento y producción de las diversas expresiones artísticas y culturales, para que la población estudiantil se interese por el legado artístico, cultural y universal y el de nuestros antepasados, lo cual contribuirá a que los estudiantes y las estudiantes enriquezcan sus conocimientos sobre diversas manifestaciones culturales, y, a la vez, fortalezcan sus tradiciones e identidad como parte de una nación. El desarrollo de actividades artísticas y culturales debe propiciar una relación de armonía con el ambiente e impulsar una cultura para el desarrollo sostenible orientada a la adquisición de valores y al desarrollo de actitudes positivas. También deben estar vinculadas con la familia, el entorno sociocultural y natural, la región, la nación, las etnias, el respeto por la dignidad y la vida humana, los derechos humanos, la vivencia democrática y la diversidad cultural. Las actividades educativas que promueven el conocimiento y producción en el ámbito artístico-cultural universal estimulan el desarrollo integral del ser humano y reafirman la identidad de los pueblos”. (Las negritas son nuestras).
Lo anterior nos hace dudar de que el CONACED tenga algo que ver con la misteriosa idea de eliminar materias de corte humanista. Es irónico, y hasta parece una broma, que, justo cuando atravesamos por una crisis de valores mientras la violencia cabalga como un jinete por todo el país, justo cuando se realizan pequeños esfuerzos por rescatar la autoestima y los valores en los jóvenes, desde las esferas del gobierno nazca una idea que parece una asesoría de los mismos abismos del infierno, porque más satánica no puede ser; un claro intento de quitarle a la instrucción pública lo poco bueno que le queda.
Para nosotros esto no es más que una forma de intentar dogmatizar la educación de una manera sigilosa. Pero no somos las primeras víctimas; ya en 1997 el mundo de la cultura en Europa fue sacudido cuando las sucesivas reformas educativas que se venían desarrollando impulsaron a que más de 200 intelectuales firmaran un manifiesto contra “el desarraigo cultural y la degradación intelectual de los jóvenes”. En esos años José Luis Sampedro había catalogado de “catastrófico” lo que sospechaba como una clara avanzada del mundo global y su intento de dejar en el olvido la realidad de la cultura humanista.








Diógenes De Las Rosa



En nuestro país, pensadores como Diógenes De La Rosa han advertido y aconsejado sobre el tema, pero parece que poco a poco se han ido olvidando de sus aportes. Dice De La Rosa: “Una educación humanista es justamente, la que le da al hombre un concepto conjunto, unitario y global del hombre como hacedor de sí mismo, como hacedor de su propia historia y que le da al hombre un concepto general de su propio mundo (…)” Y más adelante añade: “… la escuela panameña, desde hace muchos años, ha perdido de vista que su misión es formar hombres con concepto del hombre, para tratar de hacer especializados…” No nos extraña, entonces, que, en la actualidad, el concepto de “capital humano” haya sustituido al concepto del hombre con sentido humano y la educación un blanco para sintetizarlo y dogmatizarlo.



Guillermo Andreve



Si los jóvenes aprenden algo de agricultura, historia o arte en la escuela, no es para que vayan a ser campesinos, historiadores o músicos; es para tener una conciencia de la tierra donde viven y así cuidarla; un soporte histórico de su pasado que los haga sentirse herederos de una tradición y una identidad; un concepto de la estética que los persuada de que existe la belleza. Por eso, Guillermo Andreve hablaba de la urgencia de fomentar la enseñanza de la agricultura para que los recursos naturales no estén expuestos a la explotación, a la miseria y a la ruina; justamente lo que pasa hoy. En fin, las materias de corte humanista nos ayudan a tener una visión más general del mundo; lo que ayuda a aumentar nuestra sensibilidad y la capacidad crítica.


Es curioso que la mayoría de los pensadores panameños coincidieran en muchos aspectos cuando hablaban sobre la educación. José D. Moscote apostaba por una educación integral. Una educación para “cultivar el amor”, para la “fuerza espiritual”, una educación que tome en cuenta la ciencia, la religión y la filosofía, “todos aquellos auxilios que puedan servir a la integración del ser humano haciéndolo más apto para la comprensión y la práctica del bien…”. Octavio Méndez Pereira escribió: “Las escuelas primarias, sin descuidar la elevación de la cultura y del espíritu, deben preparar para el trabajo eficiente, para la industria, para la lucha por la vida en todas sus fases”.

José D. Moscote




Una educación con carácter debe tener hábitos de disciplina, aptitudes cívicas, sentimiento nacionalista, y una preparación intelectual para el trabajo eficiente en una sociedad que exige eficiencia, pero que necesita sensibilización social y cultural al mismo tiempo. Esto, como ha advertido Noam Chomsky, significa “dotar con las armas intelectuales” al pueblo para entender su situación, lo que implica un “riesgo político para la estabilidad del status quo”.


Octavio Méndez Pereira


Cuando hablamos de educación no podemos dejar de pensar en los protagonistas principales del tema: los estudiantes y los docentes. Si nos enfocamos en los estudiantes pensamos en qué se está haciendo para fortalecer el desarrollo del pensamiento en los niños y jóvenes, cuál es la visión de lo que es una persona culta y qué necesita para ser útil en la sociedad. Si nos dirigimos a los educadores nos preguntamos cuáles deben ser sus cualidades y actitudes, qué es lo realmente importante para el docente cuando enseña y qué concepto o teoría tiene de su vocación. Hablemos de ambos.

Alfredo Cantón


Alfredo Cantón decía: que si la sociedad no tiene una concepción clara de lo que ella es, si no sabemos qué tipo de ciudadanos queremos, es porque carecemos de una filosofía de la educación: La escuela es una institución que refleja el pensamiento, modalidades y valores de la sociedad que la creó, dice Cantón. Sentimos la ligera sospecha de que allí radica el problema: no tenemos una filosofía de la educación, por ende; no tenemos un proyecto de nación. Nuestros maestros no tienen claro si hay que educar para la verdad o para la libertad. No se sabe bien qué significa democracia y queremos un país democrático. Hay confusión en conceptos como pragmatismo y utilitarismo.
Pensamos que los que escriben decretos deberían de preocuparse por el tema de qué es realmente importante y qué es realmente útil. Es aquí donde pragmatismo y utilitarismo friccionan sus diferencias, y donde el humanismo se convierte en una especie de árbitro.
A inicio de la década del 90 en los Estados Unidos (sabemos que no es nuestra realidad, pero ya se verá por qué citamos el caso) se llevó a cabo un debate en torno a la educación y la forma en que debía de desarrollarse el pensamiento de los estudiantes. Richard Rorty, fiel seguidor del pragmatismo de John Dewey, aportó algunas ideas entre las cuales decía que el papel de las escuelas es crear ciudadanos ilustrados y pensadores independientes que puedan distinguir el bien del mal por sí mismo. Este concepto deweyano deberíamos tomarlo en cuenta en nuestra realidad y no criticarlo sólo porque somos de izquierda o derecha. Diógenes De La Rosa, José D. Crespo, Otilia Arosemena de Tejeira, entre otros pensadores panameños, elogiaron los atributos del pragmatismo y sus cuestiones positivas.


Hay que tener claro que la educación pasa por dos procesos distintos e igualmente necesarios, dice Rorty: la socialización y la individualización. Para que el individuo tenga un acercamiento a la verdad y a la libertad debe pasar primero por un proceso de socialización (la escuela primaria y secundaria), donde se “familiarizará a los jóvenes con lo que sus mayores toman como verdadero”, y luego por un proceso de individualización (la universidad), donde se estimula la duda y la interrogación. Esto no significa que no se pueda estimular también la imaginación desde la primaria y la secundaria; significa que al acumular conocimiento en los primeros años se debe lograr hacer otras cosas que lleven a la experiencia con la libertad.


José Daniel Crespo


Históricamente han existido dos escuelas: la tradicional, que se basa en la herencia cultural (humanismo) y la nueva escuela, que se interesa en aprender los problemas de una sociedad que cambia continuamente; de allí conceptos como educación permanente y continúa. Lo que dice el pragmatismo es que ninguna de estas dos escuelas es suficiente (hoy día) en sí misma: ambas son útiles e importantes, esenciales. Creemos que hay que pelear por un concepto de la educación integral verdaderamente sensato. Creemos que hay fuerzas que conspiran para que las teorías de una educación integral se diluyan en el debate entre las personas de la derecha política y la izquierda política. Debemos apostar por una educación sin dogmas, como aconseja Rorty. De lo contrario perderemos el horizonte.
¿Será cierto que la teoría del capital humano es fundamental en la educación para salir del subdesarrollo? Creemos que no. Aquí es donde se tiene una concepción errónea del pragmatismo para vincularlo con la cultura utilitarista. En lo que a nosotros concierne, el capitalismo y su concepto del capital humano, cuando de educación se trata, solo importa si ayuda a incrementar el PIB; si no entorpece el sistema del capital global; si responde solamente a los planes económicos de inversión; y si las reformas para modernizar la educación contribuyen para hacernos creer que existe una estrecha relación entre el desempleo, la pobreza y la educación.
En la cultura utilitarista la calidad y la productividad de un individuo es el resultado de su entrenamiento, no de su saber integral. En realidad, la educación básica no es necesaria para la mayoría sino para una minoría económicamente activa en una sociedad donde no hay trabajo para todos. De allí los intereses de eliminar lo que no es “útil” en el currículum como la historia, la religión o la cívica. Debemos admitirlo: es la mejor forma de reciclar gente que hemos visto.
Dejemos esto más claro que el agua del Mataznillo, como dice nuestro querido profesor Felix Figueroa que nos enseñó lo mejor de la cultura humanista: para los teóricos del capital humano, el desempleo es culpa de un sistema educativo obsoleto. Por eso se inyectan políticas de ajuste estructural para mejorar la educación y hacerla más equitativa: todo esto es un engaño, en realidad lo que se quiere mejorar es la salud de las IFIS. Los paradigmas ideológicos de los apósteles de la educación neoliberal y utilitarista son luchar por una teoría del capital humano y los conceptos de productividad. La modernidad de la educación, según estos mercenarios ideológicos, consiste en adecuarse a la estructura de producción de las necesidades del mercado; la literatura, la historia, la cívica, ni siquiera la religión y la cultura, sirven para nada en este escenario.


C.F.

martes, 20 de noviembre de 2007

Para democratizar la cultura




Los espacios públicos pueden ser alternativas para la construcción de proyectos culturales a la hora de pensar en la democratización de la cultura. Un verdadero desarrollo cultural parte de saber usar el patrimonio tangible con inteligencia y creatividad. Muchas veces nos hemos preguntado por qué nuestros museos, para mencionar un caso, tienen que ser solo espacios para preservar la memeoria; por qué no hacer que esa memoria tenga más movimiento y sea algo activo: vivo. Recordamos cuando en el Museo de Historia hicimos una actividad de literatura oral donde se recreo el incidente de la tajada de sandía y los niños pudieron vivir más la historia a través de la literatura oral y recreativa.
Ultimamente hemos sido testigos de cómo nuestro patrimonio, para ser más concretos, nuestro Casco Viejo de la Ciuadad de Panamá, ha funcionado como espacio para llevar proyectos culturales muy atractivos: exposiciones de fotografías en formatos gigantes, festivales de jazz, arte alternativo, temporadas de veranos, entre otras iniciativas que ayudan a democratizar la cultura y sacar a los artistas de las galerías y los teatros.
En esta ocasión La Oficina del Casco Antiguo con el apoyo del Instituto Nacional de Cultura y un grupo de empresarios que apuestan por la cultura, ha organizado, del 12 al 16 de diciembre, un espectáculo sin antecedentes en nuestra historia cultural. Se trata del I Festival Internacional de Danza Contemporánea en Paisajes Urbanos de Panamá. El proyecto Sobre Saltos 2007 aglutina a diversas compañías de danza cuya propuesta estará en las calles, fachadas, parques, y plazas de San Felipe.
Lo mejor es que es completamente gratis y para todas las clases sociales. Para tener una idea de lo que no debemos perdernos, se puede consultar la página web:
Mira de Nuchu aplaude esta propuesta, porque es atractiva, valiente y creativa; y le dará más movimiento, del que ya existe, a nuestro Casco Antiguo; ayudando así también a que los espacios urbanos sean revalorados desde el hecho estético y la violencia que a veces los ocupa sea reprimida.
El programa se puede consultar en la página web citada.
CF

miércoles, 7 de noviembre de 2007

La literatura no sirve para nada

Una vista parcial del público que asistió al Foro Nacional del Libro y la Lectura los días 29, 30 y 31 de octubre, en la Biblioteca Nacional de Panamá.


La cultura utilitarista está haciendo que las acciones culturales (en el caso de la literatura: los círculos de lectura, los concursos, revistas, y su enseñanza en las aulas) tengan un enfoque de mero entretenimiento y diversión. La cultura del ocio. Entonces la lectura pasa a ser como algo de pura diversión y placer (cosa que no está nada mal a simple vista); pero la lectura es algo más. Recordemos que la literatura pertenece a esa zona que Graciela Montes ha llamado la frontera indómita: es una zona donde la imaginación alimenta las cosas del espíritu; no es algo útil, en el marco de la globalización del mercado. La literatura es algo útil que opera de manera espiritual. Eso lo podemos aplicar a la vida. Lo que quise decir (para estimular la sana polémica) con la consigna: " la literatura no sirve para nada": es que no es tarde para que nos dejemos persuadir por el derecho a la metáfora (Michele Pettit) y el poder de las palabras; aunque el capitalismo salvaje insinue que es algo de mero entretenimiento. Esta es la tesis que propuse en el Foro Nacional del Libro y la Lectura 2007 que recientemente organizamos y que ahora publico en este blog:

INSTITUTO NACIONAL DE CULTURA
FORO NACIONAL DEL LIBRO Y LA LECTURA
BIBLIOTECA ERNESTO J. CASTILLEROS
29, 30 Y 31 DE OCTUBRE DE 2007


LA ENSEÑANZA DE LA LITERATURA
EN LA ESCUELA SECUNDARIA


Por Carlos Fong

Me permito citar una anécdota ajena que nos ayudará a tener un soporte filosófico al abordar el tema que nos ocupa. En un artículo titulado Elogio de lo inútil, Mario Bunge narra que una vez respondió a la inevitable pregunta de un estudiante, "¿para qué sirve eso?" El filosofo y físico teórico contestó: "Para nada. ¿No le parece admirable que haya gentes que se dan el lujo de preferir cosas hermosas e ideas profundas a artefactos ingeniosos pero, a la postre, superfluos o incluso dañinos, tales como los automóviles acorazados?”.
Aunque los escritores y los defensores de las ficciones se retuerzan del coraje, esta es la única respuesta válida para aplicarla en el momento en que alguien nos pregunte para qué sirve la literatura: no sirve para nada. Volvamos con Mario Bunge: “¿Para qué sirve saber que hay infinitos números primos, que las distancias entre las galaxias están aumentando, que los hombres de Neanderthal fueron reemplazados por los de Cromañón y que las cabezas de éstos eran mayores que las nuestras? Para nada. ¿Qué utilidad tiene una sinfonía de Beethoven, una pintura de Velázquez o un relato de García Márquez? La misma que las joyas, las ropas elegantes, los teoremas matemáticos o los hallazgos paleoantropológicos. O sea, ninguna”.
Ahora, si hacemos la misma pregunta en el marco del nuevo orden mundial y la ponemos al lado de conceptos como pluralismo político, educación con equidad, descentralización, democratización política, interacción internacional, integración regional, excelencia educativa, apertura comercial, educación continua, multiculturalidad, desarrollo económico, capital humano, libre competencia, desarrollo productivo; la literatura quedaría como algo verdaderamente inútil. Entonces, ¿por qué nos empeñamos algunos en ensañar literatura en la escuela?
Creo tener una respuesta que me contradice a mi mismo: la literatura nos ayuda en la vida a tener ideas más generales del mundo que nos ayudan a comprenderlo. Joseph Epstein afirma que a través de la literatura aprendemos que la vida es más sorprendente, fascinante, dramática y compleja que cualquiera de las teorías que se han empeñado en explicarla. En consecuencia: ser educado por las ficciones implica tener una apreciación variada de la vida; un concepto más sensible hacia la verdad, no absoluta, sino general. Quizás, en el mundo globalizado y homogéneo que vivimos, lo más sensato sea admitir, ante las convenciones del poder, que la literatura es menos útil frente a otras cosas; pero la complejidad del lenguaje nos da la posibilidad de un conocimiento más claro de lo humano.
No es la primera vez que afirmo, y espero que no sea la última, que se cae en un error al pensar la cultura, esa esfera a la que pertenece la literatura, como un remedio contra las enfermedades del mundo y su pobreza: la cultura no es mejor que una vacuna contra el sarampión o el dengue. Sin embargo, de alguna manera misteriosa ayuda a que nos persuadamos de que las cosas pueden ser mejores. Un concepto del hecho estético, por ejemplo, nos puede ayudar a saber qué cosas de la realidad merecen respeto y nuestro cuidado. El universo de la literatura es una región que al ser explorada estimula las ideas y provoca la rebeldía. Esta rebeldía es saludable y estimula otras ideas al mismo tiempo: ideas para mejorar, para comprender, para apreciar, para sentir, para resistir.
No vine aquí para hablar como especialista ni científico, sino como escritor; lo que me pone en desventaja con muchos de los que están presentes. Dirán ustedes: ¿Cómo puede atreverse a hablar sin ser pedagogo?, ¿cómo se atreve a dar opiniones sin ser psicólogo?, ¿cómo se atreve a hacer propuestas educativas sin ser docente? Peor aún: si investigaran mi pasado, descubrirían que no fui un estudiante modelo: fui pésimo en matemáticas, historia y español; fui sacado de la escuela diurna por intentar formar una pandilla para ir a una nocturna donde estudié electrónica, aunque jamás supe la diferencia de un diodo con un condensador. Hasta que llegó un profesor en aquella escuela nocturna y me puso en las manos un libro de cuentos de Cortázar. Si no hubiese sido por ese pequeño hecho insignificante, que no cambió nada el mundo si no solo mi vida; sería yo hoy, conociendo mi egocentrismo, un líder de una de las bandas más peligrosas del país.
Por ese pasado maravilloso y contradictorio me atrevo a decir que ni las teorías psicológicas, ni los modelos científicos pedagógicos, ni los contenidos curriculares y la evaluación, ni la metodología ni las pautas de formación saben cómo hacer para que los jóvenes tengan un acercamiento no obligatorio a la literatura de ficción. Y esto se debe a que no se sabe para qué sirve la literatura. Así como existen educadores que saben enseñar ciencias o historia, pero no saben decirles a los estudiantes para qué sirven en la vida las coordenadas cartesianas o para qué sirve conocer el periodo renacentista; así mismo hay docentes que no saben qué hacer con un cuento, una novela o un poema y por eso resuelven el problema dejando un cuestionario, un trabajo escrito o un mural colectivo. Cosas que a primera vista parecen positivas, pero que en el fondo oscurecen los valores intrínsecos en la obra, y no provocan la ilusión, el placer o la comprensión de lectura; mucho menos el principio de incertidumbre que ayuda al descubrimiento.
Obviamente me refiero a lo que Graciela Montes llama la instrumentación de la literatura para evaluar y demostrar que sirve para algo con el fin de que no desaparezca de las aulas; cosa que sería peor, desde luego. Algo parecido estamos viendo con muchos concursos y círculos de lectores en las escuelas. ¿Están mal estas iniciativas? Claro que no, pero existen peligros. Uno de ellos es que estemos, con toda la buena intensión, creando lectores pasivos. Un círculo de lectura también es un espacio para el encuentro, no como se da en la soledad, pero es un encuentro con el otro y el hecho de leer y comentar un libro puede ser maravilloso, pero si se es incapaz de cuestionar lo que leen, porque las herramientas que les han dado están basadas en una opinión preconcebida que apela a defender a la obra y no a valorarla y comprenderla, entonces es una pérdida de tiempo.
Sospecho que algo similar está sucediendo en el aula de clases. Algo que se introdujo desde afuera por los departamentos de español y llegó hasta la literatura: los concursos intercolegiales. Estos promueven el sentido de competencia y no la lectura lúdica y placentera; ni hablar de mejorar la competencia lingüística en los jóvenes. Todo queda resumido en el discurso y una especie de lectura comprensiva muy superficial, mecánica, sin placer, y subordinada a las bases del certamen que hasta elige los temas (algo similar podemos ver en la literatura oral y los concursos de oratoria que se han degradado en contenido imaginativo y creativo). Es verdad, al concluir la secundaria el alumno ha leído una buena muestra representativa del corpus literario y del cannon; tal vez haya ido a concursos de oratoria, de escritura y lectura y exhiba los trofeos en la recepción del plantel, pero lo más seguro que como lector sea incompetente.
La literatura es mucho más que un discurso comunicativo. La literatura es una forma de rebelión. Si la literatura es duda e interrogación como afirman Milán Kundera, Salman Rushi, Tomás Eloy Martínez y Carlos Fuentes, entre otros, por qué no dejar que el estudiante de hoy, que es otro rebelde, con un espíritu de autonomía despiadado, dude e interrogue el texto. Este principio de libertad puede ayudar a que la literatura sirva como motivador de discusión que provoque propuestas creativas. Si la literatura es descubrimiento, por qué no dejar que el estudiante descubra a través de su propia curiosidad. Estamos hablando de canalizar la rebeldía y la autonomía, como ha sugerido Félix Manuel Burgos. Sé que no es fácil. También para esto hay que trabajar sobre los contenidos, elaborar planes y proyectos institucionales de lectura comprensiva; organizar el currículo y el cannon literario escolar, y lo más difícil: evaluar.
La mayoría de los expertos coinciden en que no se puede evitar la evaluación; esta es importante para la valoración del aprendizaje. Pero aquí hay que tener también cuidado de no simplificar e instrumentalizar aún más la función de la literatura, sólo con el resultado de un examen escrito. Sería bueno considerar cómo era la situación del joven antes de leer un libro y para esto se puede añadir un sistema de preguntas sencillas: ¿Qué sentimientos o emociones nos provocó la obra?, ¿motivó nuestros deseos, nuestra impresión de las cosas; dejó o removió huellas interiores, ideas, preocupaciones, sensibilizó nuestra intuición y nuestros sentidos (los sueños, los recuerdos, la experiencia de vida, etc.)? ¿Cómo percibimos la realidad y el concepto de la vida al terminar la obra?
Dice Ivan Egüez que la literatura no es una asignatura sino un sinónimo de vida. Los estudiantes hoy día no quieren que los mortifiquen y castiguen con la lectura. En medio de la indiferencia y la trivialidad del mundo, ellos también muestran preocupaciones -aunque es difícil notarlo-, en cosas como el amor, la soledad, la violencia, el destino o la naturaleza. Y es aquí donde la literatura, de la mano de un buen educador, puede ayudar a que los jóvenes tengan una idea más general de las cosas de la vida. Y una obra de arte, aunque sea parte del cannon literario, llevada con pasión e ilusión, puede ayudar a mejorar la calidad de vida de los jóvenes. La violencia, la soledad y el desorden no hallarán oposiciones sensatas en la historia de la literatura, en la preceptiva literaria, en la cronología y los estudios herméticos (eso es para los estudiosos de la cultura), sino en las acciones de los personajes, en el código existencial de cada héroe, en las posibilidades de un insignificante personaje.
Cuando Juan Preciado sale camino a Comala a buscar a su padre, Pedro Páramo, se encuentra con una legión de fantasmas, él mismo es un fantasma, el narrador es un fantasma, incluso el lector es un fantasma; cuando Juan Pablo Castel está matando a María Iribarne se está matando así mismo abriendo aún más el túnel de su existencia, por eso María lo mira con dolor y humildad mientras él le hunde el cuchillo; cuando Gregorio Samsa amanece convertido en un insecto está más preocupado por su trabajo que por su insólita condición. En cada una de estas circunstancias existenciales de los personajes hay algo para que podamos construir una idea de la vida o de la muerte. Es lo que cuenta. Es como hay que descubrir en la literatura.
He leído frases de muchos escritores en torno a los atributos de la literatura que me declaro incapaz de construir una mejor o superior, como esa de Jorge Luis Borges, en contra de la lectura obligatoria que dice: la lectura es una forma de felicidad. También William Ospina, en torno a la educación y la literatura, apuesta a una revolución de la alegría, donde la educación aspire a ver la lectura como una pasión, un placer, un juego; para divertirse y aprender con deleite y sin mortificaciones. Vuelvo al inicio: Para qué sirve la literatura: para nada. Solo para habitar y llenar nuestras zonas fantasmales y obligarnos felizmente a continuar interrogando y dudando de las cosas que andan mal y que necesitan de una idea o un pensamiento bueno o hermoso.
Podría afirmar que la literatura salvó mi vida, pero esto no prueba que deba operar así en todos los espíritus descarriados. No es para lo que sirve, no es su función, no es para lo que vino. Sospecho que tiene otros fines, otras fronteras, otras constelaciones. Tal vez es eso y mucho más. Quizá por eso la literatura es una de las cosas inútiles en un mundo globalizado con más sentido que otras cosas que parecen útiles.

El poeta y subdirector General del Instituto Nacional de Cultura , y coordinador del Plan Nacional de Lectura de Panamá, en el momento de la inauguración del Foro Nacional del Libro y la Lectura.

El poeta Héctor Collado en el momento de su ponencia titulada: 30 años de iniciativas en la promoción de la lectura en Panamá.

Algunos participantes en una mesa de trabajo para elaborar propuestas para acciones.














miércoles, 10 de octubre de 2007

PARA LEER PANAMÁ



FORO NACIONAL DEL LIBRO Y LA LECTURA 2007
“Para leer Panamá”

Justificación:
Necesaria es la formulación teórica de todas las instancias relacionadas con la promoción de la lectura para lograr la enunciación de proyectos cónsonos con los intereses y necesidades socioculturales de la población.

Las líneas de acción, así como el establecimiento de la necesidad de recursos, deben surgir de la colectiva decisión de considerar la lectura como una herramienta de inclusión social y desarrollo.

Los esfuerzos realizados a los largo del año 2005, cuando la celebración del Año Iberoamericano de la lectura, cuya duración debía extenderse hasta el 2015, cumplieron ciertas disposiciones de ILIMITA, pero, luego de las multitudinarias Caravanas de la Lectura, quedaron materias pendientes.

En 2006, el Ministerio de Educación, el Instituto Nacional de Cultura y la Fundación Biblioteca Nacional de Panamá continuaron con sus iniciativas institucionales y en algunos casos mancomunaron esfuerzos para continuar, ya en la actividad de animación de la lectura, ya en la formación de agentes multiplicadores.

El denominado Seminario Taller para la formación de promotores y animadores de lectura para el siglo XXI, ha resultado una herramienta de promoción de lectura ella misma, por cuanto se ha alcanzado la suma de docentes, estudiantes y padres de familia a esta iniciativa. Ya se agitan grupos de animadores y promotores en Chiriquí, Coclé, Los Santos y Herrera. En Panamá se destacan algunas iniciativas emprendidas en San Miguelito y Panamá Este y Panamá Oeste.

Si bien estos programas se ejecutaron por el compromiso adquirido en la Coordinación Educativa y Cultural Centroamericana (CECC), también es imprescindible acatar el mandato de una población ávida de nuevas ofertas relacionadas con el libro y la lectura.

Es urgente determinar con qué recursos cuenta el país para fomentar conductas relacionadas con educación y cultura y particularmente con lectura y bibliotecas públicas, para entonces proveerle de un verdadero sistema que atienda las falencias que no nos permiten brindar a los actores sociales programas transformadores.


Objetivo:
Vincular a la sociedad civil, la empresa privada e instancias de gobierno, para elaborar un Plan Nacional de Lectura.

Primera etapa: Presencial
Fecha: 29, 30 y 31 de octubre
Horario: 9:30 a.m. – 4:00 p.m.
Sede: Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero R. (Sala de Uso Múltiple)

Gestores y responsables
Comisión de Educación y Cultura Asamblea Nacional
Instituto Nacional de Cultura, INAC
Ministerio de Educación, MEDUCA
Ministerio de Desarrollo Social, MIDES
Fundación Biblioteca Nacional,
Cámara Panameña del Libro,
Proyecto iberoamericano de literatura infantil,
Asociación panameña de la lectura,
Alcaldía de Panamá,
Consejo Nacional de Rectores,
Asociación de Escritores de Panamá,
Consejo Nacional del Libro y la Lectura,
Red de Círculos de Lectura,
Patronato del Servicio Social Nacional,
Proyecto Siembra de Lectores

Ejes temáticos:

Eje 1: Lectura y Educación
· Responsable: Ministerio de Educación

Eje 2: Lectura e identidad cultural: proyecto social.· Responsable: APALEC, PIALI, Círculos de lectura

Eje 3: Experiencias en materia promoción de lectura y formación de actores.· Responsable: Fundación Biblioteca Nacional de Panamá

Eje 4: La lectura: asunto de política pública.· Responsable: Consejo Nacional del libro y la lectura
o Ley del libro

Eje 5: Acceso y Acercamiento al Libro y al Proceso Lector.· Responsable: Cámara Panameña del Libro


Ponencias:

Con énfasis en el diálogo, las ponencias serán sustentadas en experiencias y trayectoria, iniciativas institucionales o trabajos de campo.
Extensión máxima hasta siete páginas 8 ½ X 11.
Deberá destacarse el eje temático en que se inscribe.
Ninguna intervención se excederá de los 15 minutos.

Las propuestas serán entregadas a la organización del FORO o enviadas por correo electrónico a: paraleerpanama@gmail.com


PARA SU REPRODUCCIÓN

Metodología:

Conferencia inaugural
Ponencias por eje temático en jornadas matutinas y vespertinas
Plenario interactivo.

Programa general El Foro iniciará el lunes 29 de OCTUBRE a las 9:30 a.m. En la Sala de Uso Múltiple.



Los días 30 y 31 de septiembre el programa se desarrollará de 9:30 a 12:00M. y de 1:00 a 4:00 P.M.

El programa se irá actualizando conforme se inscriban las ponencias y confirmando la participación de grupos e instituciones.

martes, 2 de octubre de 2007

Concurso Literario Ricardo Miró 2007



Estimados amigos:


El Concurso Literario Ricardo Miró, que organiza el Instituto Nacional de Cultura de Panamá, celebra este año su versión número 65. Desde entonces ha corrido mucha agua por el río de la literatura panameña. Un río cuyos afluentes dejan una radiografía de las preocupaciones temáticas y estéticas de los autores panameños. Sería muy interesante tener un estudio que compile todos los elementos que caracterizan a las cinco secciones del concurso, pero eso es una tarea titánica que debe realizarse por varios especialistas que tomen en cuenta el género y las décadas para tener un registro sistemático.

Como un homenaje a este concurso literario tan importante en el istmo centroamericano, publicamos un trabajo que realizamos en torno a los cuentos ganadores en la década del 80. También les regalamos un registro de los ganadores de la sección cuento; la reseña histórica del Concurso y la programación de las actividades con los jurados internacionales.


VALORACIÓN CRÍTICA DE LOS PREMIOS RICARDO
MIRÓ DE LA SECCIÓN CUENTO EN LA DÉCADA DE LOS 80*

Por: Carlos Fong

MARCO HISTÓRICO NACIONAL-INTERNACIONAL 1980 – 1990

La década de los años 80 es una época de grandes cambios y agitaciones políticas para Panamá: golpes de Estado, sucesión precipitada de gobiernos, grandes movimientos de huelgas y luchas obreras y populares; el surgimiento de la agremiación de los empleados públicos, profunda crisis política y económica, fraudes electorales. Es una época de inestabilidad. Solamente de 1981 a 1984 se da la sucesión de cuatro presidentes. En total son siete hasta 1989. En 1981 muere Omar Torrijos y la crisis se empeora a partir de ese momento. Posteriormente, con el asesinato de Hugo Spadafora en 1985, las manifestaciones populares se agudizan: huelgas de educadores y médicos; el gobierno asume el control de la administración de la policía en el antiguo territorio de la Zona del Canal.

A finales de los 80, con el General Manuel Antonio Noriega en el poder, el país vive una de las peores crisis económica–política: cese de todas las operaciones bancarias y congelación de los fondos del Banco Nacional. En 1989 se anulan las elecciones por los militares y, finalmente, en diciembre, se da la invasión del ejercito Estadounidense a Panamá.

En el marco internacional para 1981, Ronald Reagan, quien no simpatiza con los Tratados Torrijos–Carter, sube al poder en su país. Nace el Cartel de la droga en Colombia. Se reactiva los movimientos guerrilleros en El Salvador. La contra y los contra inician la contrarrevolución en El Salvador. Todo esto tiene importantes repercusiones en Panamá: somos el centro de estos conflictos. Estas circunstancias afectan también en alguna medida la sensibilidad de los escritores nacionales paras quienes la realidad nacional y cotidiana es una catapulta para la exploración de los problemas de la sociedad a través del repertorio ficcionario.

Sin embargo, en las obras ganadoras de la sección cuento del concurso Ricardo Miró no es una temática principal ninguno de estos acontecimientos, pero sí existe una preocupación social que se refleja en situaciones existenciales históricas acaecidas a algunos personajes y que se remontan, inclusive, a la década del 20 y del 40.

LOS PREMIOS, LOS AUTORES

1980 – Desierto
1981 – La lluvia sobre el fuego de Giovanna Benedetti (1949). 1982 1982 - Las aventuras de Piti Mini de Ernesto Endara (1932).
1983 – Cuentos de la vida de Herasto Reyes (1952).
1984- Un lucero sobre el ancla de Ernesto Endara (1932).
1985 - ¿Quién inventó el mambo? de Rosa María Britton (1936).
1986 – Cuentos de acá y de allá de Pantaleón Henríquez Bernal (1915).
1987 – Desierto.
1988 – Potentados de Sueños de Cirilo Castillo Barrera (1940).
1989- Nada personal de Beatriz Valdés (1940).

Neco Endara es el único autor que gana dos veces en esa década en el mismo género: 82 y 84. Cronológicamente no se puede hablar de una generación entre los ganadores. Hay un vínculo generacional entre Rosa María Britton y Neco Endara: década del 30. Cirilo Castillo Barrera y Beatriz Valdés nacen el mismo año: 1940; y Giovanna Benedetti en 1949. Pantaleón Bernal nace en 1915 y Herasto Reyes de 1950.

EJES TEMÁTICOS Y TENDENCIAS
Según Ricardo Segura en Tendencias y perspectivas del cuento en Panamá: 1960 – 1991, las temáticas a las que tienden los autores en la década del 80 son:

Perduración del realismo crítico enriquecido con nuevas modalidades temáticas: los marginales, las minorías sexuales y la liberación femenina.
Reivindicación de lo cotidiano en un espacio de época.
Tendencia existencialista en que sobresale el tema de la alineación social y la búsqueda de la autenticidad.
La modalidad fantástica o la presencia de una realidad extraña a nuestra experiencia nacional.
La recreación histórica que rescata acontecimientos estelares de la historia patria.
La movilidad policíaca.

Muchas de estas características las podemos encontrar en los trabajos ganadores del Concurso Ricardo Miró de la sección cuento en los años 80. Específicamente:

1. Preocupación existencialista en una realidad cotidiana.
2. Reivindicación de los valores femeninos y su papel en las luchas sociales.
3. Lo lúdico como expresión creadora en una realidad alienante.
4. La situación histórica existencial como crítica y denuncia.
5. Intento de conciliación del espacio rural y el espacio urbano.
6. La realidad cosmopolita y universal como expresión de la autenticidad nacional.
7. Lo fantástico introducido con un lenguaje sencillo, irónico y a veces patético.

ENTRE LO RURAL Y LO URBANO
El discurso en los cuentos ganadores del Ricardo Miró en la década del 80, a pesar de contar con algunos temas nuevos descritos por el profesor Segura como el erotismo, la conciencia de la alineación social, la preocupación por los personajes marginales e innovaciones expresivas, no deja de girar en torno a lo rural y lo urbano como expresión de nuestra panameñidad; de hecho uno de los libros se titula: Cuentos de acá y de allá; con excepción de la obra de Beatriz Valdés: Nada Personal, que parece tener una propuesta para alejarse del localismo urbano y el ruralismo.

Esto no es un descubrimiento: Desde que Ignacio J. Valdés en su obra Cuentos panameños de la ciudad y el campo intentó distinguir las características de ambas tendencias, pasando por Rogelio Sinán, quien introduce el vanguardismo y luego “intenta conciliar la relación entre el cuento urbano y rural” (Hudson, 2003) el discurso en la narrativa panameña gira en base a una preocupación por la problemática nacional tanto de las ciudades como del campo y los temas, los espacios y el lenguaje cosmopolita no es predominante (Menton, 2001).
Ahora veamos brevemente cada uno de las obras ganadoras del Miró en los 80.

APRECIACIÓN FINAL.

Los cuentos ganadores de la sección cuento del concurso Ricardo Miró en la década del 80 se enmarcan en un espacio temporal rico en posibilidades que aprovechan algunos autores con la innovación temática y el recurso expresivo. Sin embargo, es evidente la preocupación por dejar un registro de lo rural y lo urbano en una producción donde lo nacional se aleja de lo cosmopolita. En algunos autores descubrimos la voluntad de parodiar las convenciones del poder y de problematizar la historia (Britton, Endara y Reyes) o de aspirar a un relato universal (Valdés). No es posible encontrar un vínculo de preferencias generacional ni tampoco procedimientos y códigos estéticos comunes aunque el lenguaje en algunos (Bernal, Barrera) parezca apelar a un sistema cultural-ideológico común. Los une, eso sí, una circunstancia histórica: la efervescencia política de los años 80; pero esto tampoco es una preocupación para todos que se refleja en los textos. Veamos.

La lluvia sobre el fuego (1981) de Giovanna Benedetti.
Con nueve cuentos el título del libro alude poéticamente a las relaciones conyugales. La posibilidades de los personajes giran alrededor de los rituales y la monotonía doméstica. El monólogo y la primera persona priman. La realidad se fricciona con la irrealidad. Hay interesantes pincelazos eróticos. La casa es un espacio donde los personajes encuentran reinvidicación. Sobresalen los cuentos: El fuego sobre la lluvia, La lluvia sobre el fuego.

Las aventuras de Piti Mini (1982) de Neco Endara.
Con una estructura lineal, en estos siete cuentos largos las aventuras del personaje son un diálogo silencioso relevante con la memoria. Lo lúdico como expresión creadora. La nostalgia y el retorno de los héroes “míticos”: D’Artagnan, El Capitán Maravilla, Tarzán. La soledad como impulso de la creación. Las aventuras de Piti Mini (9 años) nos recuerdan al Zalacaín de Baroja. La guerra (1941) en los ojos de un niño. La situación histórica existencial. La ciudad y la casa como posibilidad de los personajes.

Cuentos de la Vida (1983) de Herasto Reyes.
Cinco cuentos donde queda explícito la importancia de poder resistir. Impera el parlamento como expresión cotidiana; el protagonismo de la mujer en las luchas sociales; la denuncia de la dictadura; las situaciones históricas que marcan la condición existencial de los personajes. El narrador es muchas veces una voz colectiva: la del pueblo (las marchas, por ejemplo). Personajes marginales como expresión de la panameñidad y la identidad lo urbano y la casa como expresión de lo cotidiano. Cuentos representativos: Ñare y Chombo Black.

Un lucero sobre el Ancla (1984) de Neco Endara.
En estos 8 cuentos y dos notas a manera de epílogo Endara es uno de los autores que apela, con un discurso ameno y entusiasta, a un sensibilidad por la patria y distancia. El mar es el motor que elogia y crea posibilidad al personaje. La nostalgia por el pasado lo urbano, la ciudad; lo universal, la valorización de la naturaleza y la ecología Panameña. El cromatismo en el lenguaje son algunos de las características que matizan estos cuentos.

¿Quién inventó el Manbó? (1985) de Rosa María Britton.
Lo autobiográfico como lenguaje ameno y sencillo. Protagonismo de la mujer. El efecto nostálgico de algunos paisajes. El caserón como espacio identitario. La fragilidad de las convicciones políticas. El recurso irónico. Cuentos representativos: La Alambra y El baúl de belén.

Cuentos de Acá y de Allá (1986) de Pantaleón Henríquez Bernal.
Es uno de los libros de menor calidad literaria en esta década que mereció el Miró. Los once cuentos son en realidad anécdotas que logran alcanzar estructura de relato. Contraste entre lo rural y lo urbano. Situaciones históricas de la década del 20. Los textos son salvados por el tono humorístico y la habilidad de relatar con entusiasmo. Se destacan: La sesión; El almendro; y Las aventuras de un “orejanito” en la capital.

Potentados de sueños (1988) de Cirilio Castillo Barrera.
Es un libro de catorce cuentos con poca calidad literaria. Por suerte el mismo autor, a manera de prefacio, lo advierte en las primeras páginas como advertencia al lector. Intento de describir la vida obrera. Denuncias a la dictadura militar, las pasiones humanas y su condición existencial. Algunas la tramas salvan al libro del fracaso. Entre sus otros cuentos están: El elixir; La iniciación; y El arresto.

Nada Personal (1989) de Beatriz Valdés.
Sin duda uno de los mejores libros que cierra la década con broches de oro. Compuesto de siete cuentos con personajes bien logrados y caracterizados. Unidad temática. Espacios que rompen y se alejan del localismo: el cielo, el infierno, el paraíso... Una propuesta inteligente y creativa para distanciarse del localismo urbano y rural. Cuentos representativos: Nada personal; El derviche, y Una tentación para Satán.

BIBBLIOGRAFIA

SEGURA, RICARDO 1992. Intentemos la utopía, Memoria del primer Encuentro Nacional de Escritores Jóvenes (comp.). Especialmente: Tendencias y Perspectivas del cuento en Panamá 1960-1991. Panamá, Editorial Mariano Arosemena, INAC,

GARCÍA HUDSON, MARIO 2001. Qué son La Lomas y Cristales de Ariel Barría Alvarado, Casa de Gobierno de David, Chiriquí, 2 de octubre.

MENTON, SEYMOUR 2001. Revista Iberoamericana, Vol. LXVII, Núm. 196, Julio Septiembre, pg. 399.


* Ponencia presentada el martes 11 de noviembre de 2003 en el Salón de Profesores de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Panamá en el marco de las actividades realizadas para conmemorar el Centenario de la República.



GANADORES DE LA SECCIÓN CUENTO
DESDE SU CREACIÓN HASTA EL 2006

Boris Zachrisson
• La casa de los ladrillos rojos y otros cuentos 1957

Moravia Ochoa López
• Yesca 1960

Eustorgio Chong Ruiz
Techumbres, guijarros y pueblos 1964

Saúl Trinidad Torres
• Desde un espejismo 1967

Pedro Rivera
• Peccata Minuta 1969
• Las huellas de mis pasos 1993

Justo Arroyo
• Capricornio en gris 1972
• Rostros como manchas 1991
• Para terminar diciembre 1995
• Nadie en su sano juicio
(Réquiem por un duende) 2001


Ricardo J. Bermúdez
• Para rendir al animal que ronda 1974

José Antonio Córdova
• Con Irene y otros cuentos 1975

Ernesto Endara
• Cerrado por duelo 1976
• Las aventuras de Pity Mini 1982
• Un lucero sobre el ancla 1984
• Llovizna de verano 1998
• Al principio creó Dios la curva 2004

Edgar Soberón Torchía
• La historia de Dorita Quiñónez y otros feminismos 1977

Dimas Lidio Pitty
Los caballos estornudan en la lluvia 1978

Giovanna Benedetti
• La lluvia sobre el fuego1981

Herasto Reyes
• Cuentos de la vida 1983

Rosa María Britton
• ¿Quién inventó el mambo? 1985

Pantaleón Henríquez Bernal
• Cuentos de acá y de allá 1986

Cirilo Castillo Barrera
• Potentados de sueños 1988

Beatriz Valdés
• Nada personal 1989
• La estrategia del escorpión 1996

Rafael Ruiloba
• Vienen de Panamá 1990

Antonio Paredes V.
• El duende y otros cuentos1992

Consuelo Tomás
• Inauguración de la fe 1994

Pedro Luis Prados
• Bajamar 1997
• El otro lado del sueño 2002

Sydia Candanedo de Zúñiga
• Los papelillos del doctor Escarria 1999

Eustorgio Chong Ruiz
• El cazador de alforja 2000

Allen Patiño
• La niña de mis ojos 2003

Enrique Jaramillo Levi
• En un instante y otras eternidades 2005


RESEÑA HISTÓRICA DEL CONCURSO LITERARIO
RICARDO MIRÓ

Por gestiones del poeta Moisés Castillo, el ayuntamiento Provincial de Panamá propone por unanimidad la creación del “Premio anual de Literatura Ricardo Miró”, (Ordenanza N° 4 del 20 de marzo de 1942). Tras la desaparición de los Ayuntamientos Provinciales en 1945, es descontinuado el certamen. sin embargo, el poeta Castillo, con el respaldo de don Ernesto J. Nicolau, Felipe O. Pérez y Gil Blas Tejeira, presentan y sustentan como diputados a la Asamblea Nacional, el Proyecto de ley sobre la creación del Premio Literario Ricardo Miró (Ley N° 27 de 4 de agosto de 1946, sancionada por el Presidente de la República, Enrique A. Jiménez, y por el Ministro de Educación, don José Daniel Crespo).

El concurso se divide en tres primeros premios de mil balboas (1,000.00) cada uno y medalla de oro; tres segundos premios de quinientos balboas (B/.500.00) cada uno y medalla de plata; y tres terceros premios de doscientos cincuenta balboas (B/.250.00) cada uno y medalla de bronce para las secciones de Poesía, Cuento y Novela, originalmente.

Tras varios años de continua producción y recomendaciones de escritores e intelectuales, el Gobierno Panameño reconoce la contribución eficaz de este concurso al adelanto intelectual del país, de cara a la evolución y necesidades de la época. Así, mediante decreto de Gabinete N° 332 del 15 de octubre de 1970, bajo la presidencia de Basilio Lakas y por gestiones de su administración, el Concurso Literario Ricardo Miró es reformado, y establece cinco secciones permanentes: Cuento, Novela, Poesía, Teatro y Ensayo. La nueva reglamentación también establece un Premio Único de dos mil balboas (B/.2,000.00), medalla de oro y pergamino, para cada una de las cinco secciones.

El Concurso Miró es prestigiado año tras año por jurados que representan a diversas personalidades del mundo de las letras nacionales e internacionales.

A finales de los años noventa, el HL Oyden Ortega aporta a los ganadores del Miró con B/2,000.00 adicionales por género, iniciativa que secunda la entonces Presidencia de la República, convirtiéndose el Premio de Incentivo en B/.4,000.00. A partir de 1999, el escritor Rafael Ruiloba, Director del Instituto Nacional de Cultura, en su compromiso por la exaltación de las artes literarias, da continuidad al premio de incentivo y gestiona un anteproyecto de ley para incrementar la asignación del mismo, el cual es sustentado y prohijado por la H.L. Gloria Young con el respaldo de la comisión de Educación, Cultura y Deportes de la Asamblea Legislativa. De esta manera, la Presidenta de la República, Mireya Moscoso, sanciona la ley N°. 38 de 5 de agosto de 2002 por la cual el Concurso Nacional de Literatura Ricardo Miró se reforma, garantizando entre otras cosas, el montaje de las obras teatrales premiadas e incrementando el monto de todos los premios de B/.2,000.00 a B/.15,000.00 por género.
(Fuente: Departamento de Letras del Instituto Nacional de Cultura de Panamá)



Programa de actividades 2007

Lunes 15 de octubre

Instalación y presentación del Jurado a la Prensa.
10:00 a.m.
Deliberación del Jurado / Hotel Granada

Fallo del Jurado.
Hora: 7:00 p.m. / Hotel Granada

Martes 16 de octubre

5:00 p.m. Conferencia: Poesía y canción en CubaHotel Granada

7:00 p.m. Conferencia: El Modernismo literario en CentroaméricaHotel Granada

Miércoles 17 de octubre

5:00 p.m. Conferencia: Escribir en EspañaHotel Granada

7:00 p.m. Encantadores y autoengaño en don QuijoteHotel Granada

Viernes 19 de octubre

Premiación del Concurso Ricardo Miró 2007
Salida del Hotel 6:30 p.m. (puntual)
Hora: 7:00 p.m.
Lugar: Teatro Nacional.
Departamento de Letras: 501-4952/62, fax 501-4950 (correo: letras@inac.gob.pa o en www.inac.gob.pa/letras) y al Departamento de Relaciones Públicas al 501-4012 (correo comunicacion@inac.gob.pa )

jueves, 30 de agosto de 2007

LOS VIAJES DE ACHU








Cuando miramos la obra de Oswaldo DeLéon Kantule (Achu) podemos estar seguros de garantizar un viaje imaginario a la cosmogonía y el universo de la tradición de la nación Dule. Elementos como el nuchu, el jaguar, el mar, la noche y los animales de la fauna panameña son poetizados visualmente por la paleta de un pintor que conoce sus raíces y que tiene una sensibilidad que sabe transmitir en su obra. Por qué lo relacionamos con la poesía. Veamos.
Dentro de la tradición de la cultura Dule se piensa que para poder ir al otro y volver del otro será imposible si lo hacemos de manera intelectual: es un problema del corazón no de la razón. Comprender es algo distinto, dice el indígena Abadio Green. “Se podrá ir a muchos mundos, pero si no se tiene el corazón preparado, no veremos nada”.
Esta concepción del mundo y de la vida se aplica y es primordial a la hora de tener un encuentro con la poesía y la tradición, y en la obra de Oswaldo eso es lo que descubrimos: poesía. Dice Octavio Paz: “aquello que nos muestra el poema no lo vemos con nuestros ojos de carne sino con los ojos del espíritu”. Esa la disposición permanente del poeta, también la tiene el pintor. Una disposición hacia el otro: si no comprendo al otro no puedo escribir de él.
Es por esta razón, ese deseo de comunicarse con el otro, que el artista hace su declaración estética y filosófica: “El mito, el arte, la religión, los rituales y las ceremonias, por utilizar un lenguaje simbólico y metafórico son incomprendidos por muchas personas; sin embargo pueden ayudar a explicar la realidad de la sociedad de hoy, inmersa en la crisis moral, la intolerancia, la violencia, el racismo, la destrucción del medio ambiente y la globalización del miedo. Trato de expresar y comprender el tiempo que me ha tocado vivir y comprender mis contradicciones humanas y las de otros por medio de mis pinturas”.
Otros elementos que descubrimos en las imágenes emocionantes del pintor son las hamacas, las danzas, cayucos, sombreros y vestuarios; es decir, elementos de la tradición kuna tanto tangibles como intangibles que el artista convoca en un rito casi mítico casi sagrado. Los colores enérgicos le dan a sus texturas el espíritu y dimensión mental que logra hacernos viajar por mundos ancestrales.
Al mismo tiempo, la concepción de la vida y la muerte, la esperanza, la cultura, los ritos, la violencia, la identidad, la tradición oral kuna son representados y poetizados en símbolos metafóricos a través de una visión ancestral casi ceremonial, pero contemporánea; por lo que el artista se ve obligado a dejar un registro íntimo de su contacto con las cosas cotidianas que lo extrañan y lo asombran, que lo enfurecen y lo estremecen.
Finalmente, desde Mirada de Nuchu los invitamos a visitar la exposición titulada El mágico viaje de Achu de Oswaldo DeLeón Kantule, el jueves 13 septiembre de 2007, a las 7:00 p.m. en la Librería Exedrabooks.



Oswaldo DeLeón Kantule"Achu"

Acerca del Artista
Oswaldo DeLeón Kantule (conocido también como "Achu") nace en Ustupu, Kuna Yala, Panamá, en 1964. Comienza a pintar de manera autodidacta en los años 80. Luego decide estudiar en la Universidad y logrando graduarse con honores (Sigma Landa) y obteniendo el titulo de licenciatura en Artes Plásticas y Visuales de la Universidad de Panamá. Ha tenido más de 12 exposiciones individuales y ha participado en varias exposiciones colectivas en Cuba, Canadá, El Salvador, Guatemala, México, Estados Unidos y otros países. Sus pinturas están en colecciones privadas en Panamá, Cuba, España, Francia, Canadá, Alemania, Gran Bretaña, Bélgica, Portugal y Argentina, entre otros.
En 1996 Oswaldo obtuvo el Primer Premio del Concurso Nacional de Pintura del Instituto Nacional de Cultura de Panamá y fue seleccionado para participar en la Sexta Bienal de Panamá en junio de 2002. En 2004 recibió una beca de investigación para artistas visitantes del Instituto Smithsonian, en Washington.
In 2007, una de sus pinturas fue seleccionada y exhibida en la Universidad de Guelp, Macdonald Stewart Art Centre, en una gran exposición llamada: Shakespeare hecho en Canada, La exposición más grande en la historia de la galería, explorando adaptaciones canadienses contemporáneas en el teatro, en los medios populares y en las artes visuales.
En 2007 Oswaldo estará curando algunas exposiciones además de participar como artista.


Citas sobre el Artista y su Obra
"Hubo un artista de Panamá aquí (Oswaldo De León) durant un año y su ética de trabajo contagió a algunos otros artistas... El pintaba todos los días y tenía una verdadera visión de lo que estaba logrando en su obra."
John WhiteDirector, The Arts Project
citado enLondon This Week, el miércoles 19 de noviembre, 2003

"Oswaldo De León sale a luz cuando ya Luis Méndez, Olonigdi Chiari, Ologuagdi y Julián Velásquez tenían un trabajo cimentado. Al igual que ellos, sus pinturas están íntimamente relacionadas con los temas de la cultura Dule. Sin embargo, poco a poco, ha ido creando su propia gramática pictórica y con ella ha sabido desarrollar un estilo muy particular tal como podemos apreciar en Nuchu conversando con la señora del tiempo, Achu uka gi, Guardianes de Napguana, An demar sapi, An demar galu, Nuchu sourgukualedgi, Achu barbad ukagi, sólo por citar algunos de sus títulos.

Nuchu conversando con la señora del tiempo es uno de los cuadros más parecidos a los dibujos clásicos de los saila Dule. El enorme cuaderno de contabilidad le sirve al comerciante para llevar sus cuentas; el saila lo utiliza para crear obras de arte, para dibujar. Nuchu conversando con la señora del tiempo es la idea del viaje de la muerte hacia la patria final. Nuchu, una especie de tótem, en este cuadro representa a un difunto ya enterrado. En vez de colocar el cadáver dentro de un ataúd, tradicionalmente se le envuelve en una hamaca para sepultarlo. El alma viaja al paraíso eterno en un cayuco que hace su travesía por los senderos de los ríos para finalmente llegar a la gran fortaleza celestial: el Galu. Gracias a este trabajo nos percatamos que los artes visuales de los Dules son actividades de género: las mujeres bordan las morra, y los dibujos los realizan los hombres, particularmente los saila".
Aristeides Turpana
Poeta y Escritor Kuna
Boston, 2003

"Oswaldo De León Kantule es un artista que rompe drásticamente con la pintura Kuna tradicional de inspiración primitiva, creando obras de una gran fuerza y emoción, con trazos seguros que nacen de la evocación de ritos religiosos, enraizados en su cultura, pero liberados de todo constreñimiento formal.
Algunas de sus figuras parecen moverse a través del espacio, impulsadas por creencias mágicas, y sin las ataduras de la gravedad ni de la lógica".

Graciela Quelquejeu de Eleta
Crítica de Arte Panameña
Ciudad de Panamá, 1996


"A través de formas signos texturas nos adentramos en la obra de Oswaldo De León Kantule " Achu". Obras que en el paso de los ultimos años nos ha conducido de una manera diferente y muy personal a la tradición kuna.
Visión poética en unos casos y chamánica en otros donde cocodrilos, nuchus, hamacas, soles, lunas, y mujeres se mezclan con texturas signos y color que nos invitan al deleite de una cultura ancestral, y nos abre las puertas a un mundo mágico de secretos rituales arraigados en su experiencia de vida y en el compromiso de este por contar y mantener la tradición de su pueblo.
Desde lejos, Oswaldo nos ofrece la visión de un miembro de una comunidad comprometido con su raza y que aun así de lejos la recuerda la añora y de ella se nutre.
En esta exposición, Casa Cultural Huellas y Oswaldo se unen para ofrecer al publico nacional su camino, en el que cada obra es un ejemplo de su avance en estos últimos años y del amor que siente por su raza".


Analisa WilliamsCasa Cultural Huellas

Tomado de: www.deleonkantule.net







La Noche de Sichagi












Nizgamba nanamai viajando bajo las estrellas

viernes, 17 de agosto de 2007

AQUÍ SOBRE ESTA TIERRA

















HOY ES NECESARIO HABLAR DE ESPERANZA:PRESENCIA DE RAMÓN OVIERO

Por: Carlos Fong

En 1971, cinco jóvenes escritores desde el exilio publicaban una modesta edición titulada Poesía Joven de Panamá. Era la escritura de la diáspora panameña que desde México construía un proyecto de identidad nacional. Estos escritores eran: Dimas Lidio Pitty (1941), Diana Morán (1929-1987), Agustín del Rosario (1945), Bertalicia Peralta (1939) y Ramón Oviero (1938). A este último dedicamos esta entrega de Mirada de Nuchu con motivo de la actividad Voces y pensamientos que realizará el Instituto Nacional de Cultura, el miércoles 29 de agosto, en el Teatro Anita Villalaz a las 7:00 p.m., en donde se hablará de la vida y obra de este creador panameño.
Compartimos lo que ha escrito Damaris Serrano: Ramón Oviero forma parte de un corpus literario que constituye “la construcción de la propuesta cultural panameña (La literatura panameña: historia, nación y sociedad, 2006) que permite tener un registro de las coordenadas para “vislumbrar el entramado cultural inextricable de una época (…)”. Estamos de acuerdo en que la poesía de Ramón Oviero se enmarca dentro del “proyecto nacional” de un periodo en el que lo estético-ideológico son parte de una estrategia textual que poetiza no sólo elementos de la vida íntima y cotidiana, sino de las circunstancias históricas existenciales de la realidad latinoamericana para edificar un concepto de una “identidad como frente de resistencia…una cultura de renovación y resistencia” (Serrano, 2006).
Ramón Oviero es el seudónimo de José Iván Romero Jaén. Forma parte de una frondosa familia cuya historia no deja de ser fascinante (ver: Una historia familiar: al encuentro de los Jaén-Lombard, José Iván Romero Jaén (Ramón Oviero), Editorial Portobelo, 2005). El apellido Jaén tiene raíces seculares en la historia de la República. La historia de la familia Jaén-Lombard se desarrolla en la paradisíaca isla de Taboga a mediados del siglo XIX, pero sus raíces telúricas vienen de Coclé, donde nació Isidiro Jaén Morales producto de la unión de don Salvador Jaén con Soledad Morales. Isidro Jaén emigra a Taboga donde se casa con Viviana Torres y tienen seis hijos; uno de ellos, “Salvador Jaén Torres, el menor de los hermanos, nacido en 1875, se casa con Rosa López Olivares, quien un 24 de marzo de 1877 había nacido en algún pueblo de Portugal…” (Oviero, 2005).
Oviero escribe que el verdadero apellido de Rosa era Lombard y que llegó a Panamá huérfana a los 12 años. Del matrimonio de Rosa con Salvador nacerían 15 hijos: uno de ellos era Julieta de Las Mercedes; nació el 20 de julio de 1911. Años más tarde, el 29 de octubre de 1938, Julieta traerá al mundo a uno de los poetas más notables de la poesía de postvanguardia: ese poeta se llama Ramón Oviero.
La evolución de la obra de Ramón Oviero es interesante. El poeta ha incursionado en las distintas temáticas de la poesía postvanguardista. Desde la poesía patriótica pasando por la social, hasta la amorosa; no ha dejado de lado el poema cerebral, existencial y lúdico. Versos que son una radiografía dolida de la patria que exploran la geografía humana; versos cargados de amor, desenfado, desarraigo y que no dejan de ser parte de una propuesta cultural que aporta valores a la identidad nacional.
En su libro Inventariando, que reúne gran parte de su producción poética a partir de la década del 60, podemos ver esa evolución. La soledad, el exilio, la cotidianidad, la rebelión, la mujer/patria, la muerte, la infancia son solo algunos de los temas tratados con una estrategia textual que demuestra una concepción concreta del hecho estético que nos brinda un discurso a veces coloquial y otras veces intimista que descubre un universo real y traza una visión de la problemática existencial de la criatura humana.
Sus aportes a los temas culturales son una muestra de sus preocupaciones en torno a la conservación del patrimonio y el desarrollo cultural; además su infinito amor por la plástica panameña. Pensamos que la vida y obra de Ramón Oviero todavía merece más lectura y estudio sobre todo en nuestras escuelas y universidad. Es el mejor homenaje que se le puede dar a un poeta que ha dedicado sus versos a un país que ha sido ocupado, invadido, explotado y corrompido; justamente por eso hoy es necesario hablar de esperanza.

José lván Romero
(Ramón Oviero)

Nació en la ciudad de Panamá, el 29 de octubre de 1938.

Con estudios en Filosofía e Historia en la Universidad de Panamá. Fue director de la Editorial Mariano Arosemena del Instituto Nacional de Cultura.

Ha ejercido el periodismo cultural tanto en Panamá como en México; en ese país se activó culturalmente durante una década (1969-1979). A su regreso a Panamá ejerció el periodismo en el diario La Prensa desde su fundación en 1980 hasta 1984. Ha sido consultor de la UNESCO sobre patrimonio cultural de Panamá. Fue editor de la revista Artevisual (1985-87). Premio de poesía en el Concurso Literario Ricardo Miró (1961 y 1977) y becario de la Comunidad Latinoamericana de Escritores (México, 1977).

Libros: Los golpes y las horas (1963); Tres cantos para la paz (1965); Tú en una isla como una brasa ardiendo (1973); Aquí sobre esta tierra (1973); Contrapartida (1975); Las cartas sobre la mesa (1978); Ese tu candado ahogándose de Llaves (1983); Inventariando (1985); Décimas de viajes y otros del caminar (2002). Panamá: su patrimonio cultura (En colaboración con Héctor Rodríguez, 1993); Para sentir la pintura (1994); Hablemos de pintura (Entrevistas a pintores, 2000).



AQUÍ SOBRE ESTA TIERRA

AQUÍ sobre esta tierra y puño a puño
blandid espadas pero no claveles;
firme la voz y mientras tanto fieles
el pulso, el corazón junto al terruño.
¡Ya no! Ya no diré: celajes, cuño
de aurora, luces de tu frente, mieles
de tu boca. Y aquellas pero infieles
rosas, putas serán no de este puño.

Me voltearé. Te voltearás y luego,
cercano al codo de tu brazo izquierdo,
verás -¿verás?- pasar gallos de fuego.

Mas como dije (y digo) y vuelvo y juro,
en altavoz dirás lo que me muero
por ser de cal, palabras que procuro.

Ramón Oviero
De Hoy poesía. Panamá, 1965.




HOY TE ACECHO CON SUDORESy quejidos
con palabras inconexas
tratando de hallar
tu centro exacto
con esta mi mano
entre tus firmes piernas
haciéndole cosquillas
al mismo
cielo


BAJO TU PIEL CABALGOloco iconoclasta de mí
y desato muslos y conocidos senos
colinas de mi infancia
y volvemos siempre en espiral
a aquel mismo camino
en tanto
voy mordisqueando
tu pezón izquierdo
cuando te da por reclamar
entre cortos aullidos
la consumación
del juicio
final.


De Contrapartida, México 1974
Ramón Oviero





CUERPO EN EXILIOson las cinco de la tarde esta lluvia para mí
desconocida todavía /
tiene un sabor de no sé cuáles distancias

la música de best montgomery que escucho
por la radio
me recuerda uno que otro atardecer más allá
o más acá de tus fronteras

De Cuerpo en el exilio. México, 1972
Ramón Oviero


EL PROBLEMA COMIENZACuando
quieres olvidarte
de tu sombra;
cuando
te tratas de escurrir,
pero la sombra insiste,
cuando buscas
refugio
en la esquina
derecha de tu calle
y de tu alma,
pero el ventrículo
izquierdo te delata.

De Las cartas sobre la mesa. México, 1977.
Ramón Oviero




LA LUZ Y LA PAZ SON PARA TODOS

Digo que siempre
debemos ir buscando
y desnudando
las palabras sencillas
para llegar a todos.
Para contar
así, muy claramente,
todas las cosas
que se nos van quedando
en medio de las horas.
(…)

PRESENCIA DE LA SANGRE ADOLORIDA

Decidme rosa amarga del sollozo:
eclipse sideral de dura piedra:
mortaja inextinguible del dolor:
corazón repartido en mil pedazos:
cadealzo adolorido de tu sombra:
resonancia de hueso torturado:
campanario de frágil amargura:
raíces del dolor de los humanos
decidme: están las calles como siempre?
Son los hombres los mismos que gritaban
repartiendo la fecha del sonido?
Son los mismos? Los mismos que luchaban
con hojas y jazmines en los dedos?
(…)

De Los golpes y las horas. Panamá, 1959-1961
Ramón Oviero



En
un
hilo
la
me
mo
ria
es
peor
que
una
a
pren
diz
de
ara
ña
lle
va
da
por
el viento.


Textos con pretextos. México, 1978.
Ramón Oviero

martes, 17 de julio de 2007

Carta para seguir soñando. Homenaje a Cáncer Ortega Santizo



Querido Amigo:
Esta es la carta que nunca vas a leer y la que yo nunca pensé escribirte. Recuerdo cuando te conocí: parecías un personaje de Valle Inclán; casi un esperpento como los dibujos que hacías. A decir verdad: me diste una mala imagen de lo que yo pensaba era un artista. Pero yo era un pelaíto que no sabía diferenciar siquiera conceptos como de izquierda y derecha, políticamente hablando. Luego te vi renacer como una planta a la que le han cortado las ramas. Y creciste como un árbol y hasta dejaste nueva semilla. Cuando vi a Joaquín jugar con Ezequiel (nuestras semillas) aquella tarde en tu casa rodeado de todos esos aparatos que te hacían ver como un buzo o austronauta, pensé que no era justo. Te parecías a Charlie Parker en el cuento de Julio Cortázar, solo que tu tenías una esperanza y unas ganas de vivir que jamás he visto en mi vida. Y luego Ezequiel me preguntó: "¿por qué tu amigo está con esas máquinas?", y yo le conté un cuento.

Recuerdo cuando me hablaste de que tu condición era consecuencia de malas decisiones que algún día habías tomado y que ahora las asumías como un varón; pero jamás te arrepentiste de las locuras que habías hecho. Siempre fuiste un chechenio, un palestino, es decir: un guerrero. Jamás dudaste de nada, salvo de Dios, que como me decía Manuela, decías que sería una mala broma si es cierto que existe. A pesar de que eras ateo tenías fe en otras cosas. A veces he pensado que es mejor así (como era Herasto Reyes también): hombres ateos pero con una fe en el hombre. Y aún así decías que tu no creías en Dios, pero te portabas bien por si acaso. Y también decías que Dios tenía el deber de creer en ti. Yo creo que Dios sí creyó en ti y por eso te bendijo a lo último con una esposa y un hijo admirables.



Me enseñaste a soñar y a resistir. A creer que debemos seguir proyectos colectivos y no tan individuales. Que la vida es la cosa más maravillosa que existe y debemos cuidarla. Que la literatura es una forma de felicidad como decía Borges, pero que la felicidad está en lo que somos y creemos. Por eso eras tan terco y escribiste cosas como:






No se le vaya a ocurrir que me van a vencer,


que voy a retroceder, que ya no puedo seguir.


No vaya usted a pensar que yo me voy a rendir,


porque dejar de luchar es comenzar a morir.



Y ahora que ya no estás descubro que tenías tanta razón; que si dejamos de pelear, si dejamos de hacer las cosas que pueden ayudar a este mundo estamos dejándonos morir. Pero tu querido amigo ya eres historia patria. Aunque hayas visto morir a tu nación poco a poco, echada su suerte a la indiferencia social y cultural, sabes que dejaste semillas que seguirán resistiendo y luchando. Acaso bastara eso para que Dios crea en nosotros.
Hasta luego.




Carlos Fong





Cáncer Ortega Santizo Nació en Panamá en 1950, realizó estudios de Sociología en la Universidad de Panamá. Fue compositor de música popular, pintor, poeta y escritor. Líder del grupo Trópico de Cancer. Dejó dos libros de cuentos: La cabeza de cangrejo (Panamá, 1992) y Encuentros fugaces (Panamá, 2007). Murió el 14 de julio de 2007 en su patria.










Canciones de Cáncer



MUNDO HERMOSO(Cáncer / 1969)

En este mundo hermoso las cosas no andan bien.
Algunos tienen poco no tienen qué comer.
Los otros tienen mucho y lo han ganado mal.
Matando a mis hermanos buscando el vil metal.
Y está mal.

A mí me dicen loco porque busco la paz.
Me dicen que estoy loco porque te quiero amar.
Los locos son los otros, lo puedes comprobar,
que buscan en el mundo el oro material.
Y está mal.

Mundo hermoso bello pozo horroroso.
Calle y valle de espinas, de piedra y cal.
Herido vas de muerte, guerras y odio.
Para cambiar tu suerte hace falta amor,
mucho valor y dignidad.

En este mundo hermoso encuentro por doquier
miseria y sufrimiento, dolor que puedes ver:
los niños en la calle, violencia en espiral,
explotación y miedo, y no hay punto final.
Y está mal.

CANTO DE PAZ Y GUERRA(Letra y música: Cáncer)

Un día los hombres serán libres.
No habrá oprimidos. No habrá propiedad.
Seremos hermanos, no tendremos odios.
Cantaremos juntos un canto de paz.

Un día los hombres serán libres.
No habrá más países. No habrá más fronteras.
Seremos hermanos, no tendremos guerras.
Cantaremos juntos un canto de paz.

Pero hoy lo que debemos cantar
sobre toda la tierra es un canto de guerra.
Guerra a los enemigos del Hombre.
Guerra a los enemigos del Pueblo.
Guerra contra esos que nos matan de hambre.
Guerra a los que nos oprimen con miedo.
¡Guerra!





¡QUÉ LINDAS SON LAS MUJERES!(Cáncer)

¡Ay! ¡Qué bonita es!
¡Qué bonito que baila esa negra,
mi negra, pegadito, ¡ay!, ¡eh!

La mujer hace la Patria construyendo barricadas.
En la alfabetización, el fusil y la granada.

La mujer es decidida cuando hay que combatir.
Pa’ la Patria y pa’ los hijos quiere mejor porvenir.

¡Ay! ¡Qué bonita es…!

La mujer pare los hijos pa’ la lucha y la pelea,
Para defender la Patria, pa’ defender la bandera.

La mujer es dinamita, gasolina en combustión
con la que marcha la Patria, marcha la Revolución.

¡Ay! ¡Qué bonita es…!

¡Qué linda es la mujer!

La que cumple su deber,
Deber revolucionario.
La mujer que es combativa.
Por la Patria siempre activa.
La mujer, la proletaria.
Mujer revolucionaria.
Las mujeres me enamoran.
Por eso las quiero a todas.
La mujer trabajadora,
La de la ametralladora.
Viva la mujer, viva la mujer,
Viva la mujer.

¡Qué lindas que son! ¡Cosón!

¡Ay! ¡Qué bonita es…!

SANTANA(Letra y música: Cáncer)

Sobre la dura banca del parque
la anciana deja
descansar sus huesos
cobijada con las hojas
del periódico de ayer,
llena de trapo,
una bolsa de papel,
de almohada.

Y con voz aguardentosa
el vagabundo grita
una impertinencia,
que asesina la decencia.
¡Ay, mamá!
Mientras hipócritas señoras empolvadas
bochinchean refugiadas
tras las paredes
de los viejos caserones.

Santa Ana,
viejo parque de Santa Ana.

Pensativo y cabizbajo
porque no tiene trabajo
para llevar ropa y comida
a la familia,
se refugia en la cantina
buscando falsa alegría
en la pacha de aguardiente adulterado.

Y ese niño limpiabotas
que no juega a la pelota
por tener que batallar sustento,
va buscando unos centavos,
rebuscando su alimento,
trabajando arrinconado
casi, casi,
a ras del suelo.

Santa Ana.
Viejo parque de Santa Ana.

Yo pasé como a las tres
de la mañana.

Donde este heroico pueblo
presentó tanta batalla.

He visto muchas torres,
oí muchas campanas.

Y si hoy vivo arrinconado
por cadenas y mordazas
que me impone
con la fuerza de las armas
ese cerdo imperialista,
le aseguro, mis hermanos,
que si unimos nuestras manos
este Pueblo sabrá hacer
una Patria Socialista.

Santa Ana.
Viejo parque de Santa Ana.

Estoy seguro que tendrás
mejor mañana.

Estoy seguro que tendrás comida
para todita la semana.

Tus hijos jugarán
en mejores parques,
correrán
entre las nuevas alamedas.

He visto muchas torres,...
(variación de fragmento de
la poesía Patria, de Ricardo Miró).

¡Juega!


SEMBRADORES DEL MAÑANA(Cáncer / 80–81)

Lucharon pa que no existan más privilegios,
para que cada niño tenga escuela y colegio,
para que se acabe la vida vieja
y con su sol iluminando la que hoy empieza.

Los mártires derramaron sangre valiente
defendiendo ideales con uña y diente,
abonando la tierra con su sangre preciosa
pa' que el mañana crezca como una rosa.

Una rosa roja como la sangre,
espinas filosas pa’ defenderla.
Héroes y mártires dieron sus vidas
para que otros vivan la vida nueva,
para hacer sanar llagas y heridas,
para hacer crecer una Patria buena.

Pelaron pa’ que se acabe la corrupción,
para que el Pueblo no sufra la explotación,
pa’ acabar pa’ siempre con la injusticia.
Ellos no están muertos, están en vida.

En cada firme por la Revolución,
están. Están en vida en la Nueva Aurora,
en las manos callosas del campesino,
vivo en la clase trabajadora.

Y nos dejaron todo ese amor,
su gran ejemplo y el compromiso
es el de hacer la Revolución,
a cualquier costo que sea preciso,
y defender la Revolución,
no será en vano su sacrificio,
de defender la Revolución,
de defenderla pa’ nuestros hijos,
de defender la Revolución...

AMANECER(Letra y música: Cáncer)

Quisiera ver crecer sobre la tierra
flores de amor, que no exista la guerra.
Quisiera ver hermano junto a hermano.
Viviendo en paz, toditos los humanos.

Poder vivir sin hambre, sin miserias.
Amanecer y no encontrar tristezas.
Poder así vivir como la gente.
Si gusta usted, también ser diferente.

Pero eso sí: tener siempre presente
que hay que vivir cumpliendo el compromiso
de compartir, con cada ser humano,
nuestro sudor, amor, nuestro trabajo.

Cuando por fin todito sea nuevo
y exista paz y amor, también progreso,
podré encontrar, entonces, un relevo.
Podrá encontrar descanso este guerrero.

Amanecer contigo, mujer.
Amanecer, contigo, otra vez.
Amanecer.

CANCIÓN DE LA TERQUEDAD(Letra y música: Cáncer)

No se le vaya a ocurrir que me van a vencer,
que voy a retroceder, que ya no puedo seguir.
No vaya usted a pensar que yo me voy a rendir,
porque dejar de luchar es comenzar a morir.

En esta vida enfrenté la práctica y la teoría.
En esta lucha arriesgué todo lo que yo tenía.
Lo que me queda, daré y aunque me cueste la vida,
no me podrán acusar de no hacer lo que debía.

No vaya usted a pensar que estamos domesticados;
que todo esto acabó, que ya estamos derrotados.
Seguimos con terquedad y se los voy a aclarar:
no hay tiempo para temer, no hay tiempo para perder,
lucho por mi dignidad, mi patria, mi libertad,
no dejaré de pelear.
No, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no.

Los que seguimos la lucha, esta lucha noche y día;
estamos contra el Imperio, seguimos en rebeldía.
Yo seguiré caminando, no quedaré de rodillas.
Les juro, sigo luchando por nuestra soberanía:
Soberanía total.


¡CÓMO HAS CAMBIADO!(Cáncer)

Ayer decías que luchabas
por un mundo más justo, mejor.
Que era tuya la causa de los pobres
y gritabas: ¡Yanky, go home!

Hoy dices que eso ha cambiado,
que todo es diferente, que nada es igual;
que no existe la lucha de clases;
que todo está bien, que nada va mal.

Pareciera te dijeron al oído:
abre la cartera y cierra la boca;
y que te hicieron cosquillas al bolsillo
hoy te ocupa y te preocupa el sencillo que te toca.

Se ve que ya cambiaron tus costumbres;
que otra es tu realidad, otra es tu situación.
Y ahora te haces la loca
y aunque no haya vaselina
te bajaste el pantalón.

Aaaaaay ay ay... ¡Cómo has cambiado!
Antes ibas de frente,
ahora vas de medio lado.
Aaaaaay ay ay... ¡Cuánto cambiaste!
Ayer no te vendías
pero hoy te regalaste.

No te importa nada ni nadie.
Sólo piensas en lo tuyo, en lo que te conviene a ti.
Sueños que tuviste se deshacen en el aire,
que se joda todo el mundo y que todo siga así.

A los gringos pediste volver y quedarse
con las Bases y con el Canal.
Ya todas tus ideas cambiaste:
lo que ayer estaba bien, hoy te parece mal.

Parece se te olvida lo vivido,
lo tuyo es egoísmo, ya no hay solidaridad.
Con mentiras se disfraza tu cinismo:
finges que eres progresista, superior a los demás.

Hoy te crees respetable y honorable
tienes y disfrutas de una buena posición.
Ahora te haces la loca
y aunque no haya vaselina
te bajaste el pantalón.

Aaaaaay ay ay... ¡Cómo has cambiado!...

CANTO ECOLÓGICO(Cáncer / 03)

Quieren acabar con nuestro planeta.
Lastiman a la Madre Naturaleza.
Contaminan aguas de ríos y mares.
Al dios de la codicia elevan altares.

Envenenan todo lo que tienen en la mira.
Su lujuria por el oro no respeta la vida.
Destruyen el ambiente que nos rodea.
Hay que detenerlos: les daremos pelea.

Si protegemos la tierra, el planeta en que vivimos,
dejaremos un tesoro como herencia a nuestros hijos.
Y ellos podrán disfrutar de las aguas de los ríos,
de su cielo, de sus mares, que son tuyos y son míos.

Roban millones con su politiquería.
Nos matan la salud. Entristecen la alegría.
En nombre del progreso asolan la tierra
con el canto apocalíptico de la motosierras.

Atropellan a todo, a todo ser viviente.
Devoran los bosques. Contaminan el ambiente.
Arruinan a su paso lo más preciado que tengo:
el planeta en el que vivo, la tierra de la que vengo.

Hoy estamos decididos a defender nuestros derechos:
la tierra que me alimenta, el cielo que es nuestro techo.
Para enfrentar la tormenta haremos lo necesario
como árboles del bosque: firme abrazo solidario.
Hoy unimos nuestras fuerzas defendiendo este santuario:
luchamos por el planeta, este es nuestro sagrario.

VIDA DE PERRO(Cáncer)

Quedó como un perro muerto
en medio de la carretera.
Quiso cruzar la avenida sin mirar
sin mirar a la derecha ni a la izquierda.
Decía: “No me va a pasar a mí”
sin saber que eso le pasa a cualquiera.
Quedó con las tripas en medio de la calle
los sesos expuestos bajo el sol.
Ante todos quedaron sus íntimos detalles.
Perdió el juego de la vida, no pudo evitar el gol.

El llanto de la lluvia cayó sobre su cuerpo.
Las lágrimas del cielo diciendo que había muerto.
Algunos juraban que mucho lo querían,
aunque en vida le trataron peor que a un mamerto.
No hay duda que el momento es para hipocresía:
le odiaron a los gritos, hoy le odian en silencio.
Ahora pregonan lo bueno que era,
que admiran su valor, que le tuvieron amor.
Pero en vida le apartaban como a un perro tinaquero
como a un perro, como a un perro
sumergido en el dolor.

Nació en una camada numerosa / ayer era un cachorro juguetón
le vi comer del basurero: / un perro tinaquero, callejero y retozón.
Fue un perro, perro rabioso, / le odiaron y temieron más que a la ira de un dios
acabó siendo un perro sarnoso / al que todos apartaban, ante tanta pudrición.

Quedó allí en la vía, tal como había vivido:
tirado, abandonado al margen del camino.
El fin que encontrara no fue una sorpresa.
Dijeron con presteza que ese era su destino.
Le juzgaron su aspecto, mas nunca sus actos.
Abona el planeta, su cuerpo putrefacto.
Pedazos de sí que así los barre el viento.
Podrido su cadáver por el pasar del tiempo.
Vi su cuerpo hinchado a punto de explotar,
pero no, no te preocupes, lo podrás pronto olvidar.
Y para siempre / arf arf / vida demente / vida de perro / perro sarnoso, horroroso, tinaquero // dicen no supo vivir la vida / revolcándose en la piedra, en las drogas, en el sida / enfrentando con su cuerpo trenes, aviones, / autobuses, multitudes, policías y camiones, / sin miedo a la muerte, ni a la bomba atómica, / ni a lo que venga, ni a su buena o mala suerte, / la vida es dura, la vida no es cómica / odiado por odioso, perro rabioso / vida de perros, el mundo es un basurero.

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